¿Vender a yaya toure?

Seguramente, sea quien sea el encuestado, dirá que el mejor fichaje que hizo el Barça en las dos últimos proyectos de Rijkaard fue Touré Yaya. El marfileño tapó en la campaña anterior el gran agujero en el centro del campo que impidió, entre otros motivos, ganar la Liga en la temporada 2006/07, pero nuevos problemas llevaron al equipo a la catástrofe en la 2007/08. En mayo pasado se discutió al equipo casi por completo (recordemos que de Xavi se decía que era un perdedor, de Puyol que estaba horrible y de Iniesta que le faltaba carácter, entre otros), pero Touré fue de los pocos que salió entre aplausos día tras día del Camp Nou.

El fracaso deportivo conllevó muchos cambios, entre ellos, el del entrenador. Pep Guardiola sustituyó a Frank Rijkaard y con él llegó, aunque con un esquema de juego similar, una forma de entender el fútbol diferente. Y con Pep, Touré dejó de ser imprescindible, relegado por Sergio Busquets a la suplencia en la Liga, no así en la Champions.

Ahora se habla del presunto interés de la Juventus y del Arsenal por hacerse con los servicios del africano. Este, dolido al parecer por una promesa de ampliación salarial que no se ha cumplido, parece dispuesto a marcharse en el mercado de invierno, lo que supondría un problema para el Barça.

Porque aunque en Liga apueste por Busquets, Pep ha demostrado que confía en Touré y que para él es una pieza básica. Hasta la fecha ha jugado los cuatro partidos de Liga de Campeones, lo que da muestras de sus intenciones; valora las condiciones físicas y tácticas de Touré y cree que debe ser el mediocentro para partidos continentales de la máxima exigencia. El centrocampista de Costa de Marfil ya no es imprescindible, pero sí básico. Su baja supondría un duro contratiempo y la pérdida de un jugador como hay pocos en el mercado.

Estoy seguro de que lo ha hecho. Seguro que Pep le ha reiterado a Yaya que cuenta con él, que confía en él y que, como es lógico en una temporada tan cargada de partidos, va a disponer de muchos minutos de juego. Otra cosa es que Touré no desee aguantar esa situación o que el incumplimiento de la promesa por parte de la Junta Directiva le hagan pensar en un cambio de aires. Porque desde luego que si el único motivo para marcharse sería su suplencia, creo que Touré cometería un grave error deportivo… y que el Barça lo pagaría muy caro.